martes, 12 de julio de 2011

OTRO CUÉLEBRE

Aquí se habla de mitología astur y este señor
tiene poco de dios mítico. ¡No sé qué demonios hace aquí!

La Mitología astur, que no es más que un eslabón de la cadena que ata los dioses de una y de otra parte. Son dioses caseros, de aquellos que los abuelos contaban a los nietos junto al fuego, en casa oscura,mientras la abuela dibujaba labores entre el humo de los leños y la negrura de la estancia.

Pero eso era antes. Ahora hay otros cuélebres. Son esos políticos que llevan careta de benditos, de buena gente, de no matar una mosca y de remediarnos los problemas, todos los problemas. Cosa que los otros políticos no han hecho, ellos, los nuevos, si lo harán. Pero en cuanto llegan al nuevo estrado al que tanto deseaban llegar, dice que hay hay más problemas del que contaban. Dicen que los que se fueran, dejaron una sima que no hay forma de rellenarla a base de buena fe. Por eso es preciso apretarse más el cinturón.
Ahora ya hay que apretarse el cinturón. Primero decían que no, pero ahora dicen lo contrario. Ahora sacan letanías que antes ocultaban.

Los cuélebres también se ocultaban para hacer de las suyas. Todos se ocultan para hacer de las suyas. Todos llevan una careta risueña que cubra la verdadera cara que tienen. Todos, a ver si nos entendemos, de los políticos. Los cuélebres no precisan ocultarla. Lo hacen otros por ellos.

sábado, 27 de noviembre de 2010

DESDE EL INTERIOR DE LA CUEVA

Camuflado entre la maleza
el cazador amenaza nuestra existencia.

Cobijado dentro de la cueva que me da asilo en invierno, siento como apagados disparos de escopeta.Con cautela me acerco al exterior y,en efecto, son tiros lo que suenan y resuenan, después, a través de los ecos que las montañas repiten.

No puedo negar que me asusto. Conozco la indolencia humana y sé que si me localizan, ni San Pedro bendito me libra de recibir un par de tiros de quienes persiguen enconadamente a mis congéneres, raposos, jabalíes, corzos, aves y todo lo que, por lo general, se ponga a tiro. Y yo, busgoso al fin y al cabo, vestido con pieles y de figura deforme,mal hecho o contrahecho,encorvado,más parecido a un oso que una persona, sé que de verme alguno de los cazadores que pululan por estos altos valles del Nalón, la existencia acabaría en un instante.
Bosques secos,sin hoja y sin vida
La vida es la nuestra,,la de los busgosos.

Así que vuelvo al interior de la cueva, a acurrucarme entre la hojarasca que calienta mis huesos y mis carnes, que ya no sienten ni padecen, esperando que nunca encuentren esta cueva, bien camuflada bajo un gordo matorral, detrás de unos peñones desprendidos del monte y en medio de un castañedo donde por cierto, este año hubo muchas castañas, de las cuales hice buen acopio para tener con qué alimentarme este invierno, que por lo que parece va a ser de órdago.

Y mientras esto cuento, --¡Pim!, ¡Pam!, ¡Pum!--se oyen los disparos de las escopetas de los cazadores, bien acompañados por los ladridos de la jauría que se traen con ellos y que no dejan nada tranquilo. Si si fijan ustedes, ni en paz está el búho que anida en aquella castañal y que el pobre, como los demás congéneres, está con el alma en vilo. Ya ni en estos bosques ninguna está tranquilo, ninguno.¿Cómo lo voy a estar yo en esta cueva, que amenaza hundirse?

viernes, 26 de noviembre de 2010

HAY OTRA CUEVA DEL CUÉLEBRE


Decía y digo que, a pesar de que la nieve ha cubierto la entra a La Cueva del Cuélebre, no por eso ignoramos donde está esa sagrada oquedad que alberga el mítico ser de la fantasía mágica asturiana. Nosotros hemos reflejado en el libro editado en el 2001, en la colección "El Alquimista" su existencia. Y el título era "La Cueva del Cuélebre", donde abundan muchas historias y muchos secretos.Leyendas y sucesos.
Pero ahora resulta que aparece otra cueva del cuélebre y, además, tratando cosas de la fantasía ancestral. O sea, que hay dos cuevas. Eso, que sepamos nosotros.Que a lo peor hay más, vaya usted a saber.

Y a todo esto, ¿cuántas cuevas habrá, o pueden haber en este escenario de Internet? Dejemos de momento las cosas quietas. Y es que donde hay cuélebres, hay también busgosos, hay trasgos, y hay lo impensado,como xanas y querubes.Eso sí, unos mejores que otros.O peores unos que los demás,como en todas partes.
De tal modo que,en cuanto uno se descuide,salga de cacería o atisbar, si no cierra bien la puerta, al regresar igual encuentra su cobijo ocupado por algún congéneres.Y pasa lo que pasa.

Así que, para recordar desde cuando conocemos La Cueva del Cuélebre,que nosotros hemos custodiado por afecto y por derecho, insertamos la portada del libro que lleva por título el ya mencionado, "La Cueva del Cuélebre". Si alguien quiere o tiene algo que decir, pues bienvenido sea.Esperamos a ver que nos dicen.Mientras tanto firmamos este pliego.
Albino Suárez

jueves, 6 de agosto de 2009

HABLANDO DE TRADICIONES




La Asturias de las tradiciones cuenta mucho, pero mayormente sobre aquello que ocurra o haya ocurrido en torno a santuarios, milagros, apariciones, creencias, fantasmagorías, santos y demonios y, a la vez, procesiones, ritos, misas, intervenciones divinas, sucesos...¿Y se puede llamar ancestral a eso?. Bien es verdad que actualmente surgen asturianistas que, por lo que parece, buscan sus ancestros en músicas e instrumentos celtas, signos y otras motivaciones, como ídolos o actos rituales, que la verdad, no tenemos muy claro que vengan del arcano primitivo, romano o celta .

O sea, que las tradiciones de Asturias, si las hay, han sido violadas. La Iglesia, que condenó y aniquiló todo aquello que no le gustase, usurpó usos y costumbres ajenos que adaptó y adoptó a su conveniencia para que, por la obra y gracia de Dios que ella, la Iglesia, impusiera sus voluntades y sus ritos... Así, lo que los primitivos astures celebraban, al decir de los que dicen muchas cosas, en torno a hogueras como gracia a los cielos y a los dioses, la Iglesia lo usurpó para que se celebrase después en torno a San juan, en esa noche que dicen mágica, que aparecen Xanas y Trasgos, Cuélebres y demonios, y el santo Juan obrase milagros, mientras los mozos aguerridos saltan, igual que antaño saltaban los posibles astures, sobre las ascuas de los fuegos , en torno de los cuales se canta y se baila y se cogen de la mano, pero por el meñique, por si las moscas, diciéndole al santo que ya no hay más que quemar...
Y mientras tanto, uno-- a su aire-- mira que existe un libro que lleva por bautismo "Xanas, Trasgos, Cuélebres y Diablos", que está lleno de poemas rituales, cantos e inspiraciones sobre nuestros dioses míticos, que aunque sean de andar por casa, como son propios, pues eso, son nuestros, a los cuales, seguramente, conocieron nuestros abuelos, cuando platicaban en torno al fuego casero--Llar, en asturiano--mientras fumaban su pipa y dormitaban al calor que despedían las brasas que se iban apagando poco a poco...

Tenemos para nosotros que los dioses míticos asturianos nacieron así; en torno a los llares...

UNA LEYENDA DE XANA

Asturias toda está llena /
de mitos y tradiciones;
de leyendas, cuyos sones/
hasta las almas en pena
van convirtiendo en canciones...

La alborada viene plena /
de presagios en cadena,
de lunas y de pasiones...

Una Xana, en la fontana,/
teje el chal de la ilusión...

Pasa un zagal, y la Xana/
corre a ocultar su razón...
Desde entonces siempre mana/
de la fuente una canción

jueves, 23 de julio de 2009

Leyendo de Asturias temas
parezco tal confusión,
que llego a la conclusión
que abundan más teoremas,
más soflamas y más flemas
que armonía y comunión...
Por eso abundan los lemas
de su poca evolución....

Y, en lo que refiere autores
hay que ponerse a rezar...
Tantos son que no hay lugar
para autores anteriores
ni, por cierto, posteriores
si se intentan asomar
a la palestra, a opinar
y a dejar, con sus valores
otro modo de pensar...

En el presente, ahora mismo,
cunde tanto la osadía,
que no queda ningún día
en que no impero su "ismo"
es decir, su egolatría
y, antes que el Papa, el papismo
que condena a cruz impía
--o a silencio y ostracismo--
a cualquier otra poesía...

De modo y manera que,
en la Asturias en que vivo,
veo que tienen cautivo
--o postergado y sin pie--
al más grande que hubo y fue
el gran Camín combativo,
señor del verso y la fe
y el laurel de Apolo, esquivo
para tanto paria altivo
que ya ni Cachero lee...



sábado, 17 de enero de 2009

MODELOS...DE VESTIDOS


César Vidal que diga
lo que quiera, pero a mi
esta secuencia de Soraya
me levanta el espíritu y me
apetece colgarla a la cabecera de la cama.

Ustedes seguramente que se acuerdan. Y es que no hace mucho, cuando la ministra de Defensa, Carma Chacón acudió a un acto político con un elegante vestido, fue criticada por los de siempre: La Cope, Losantos, César Vidal, La razón, El Mundo y, consecuentemente, todos los que conforman toda la palestra ultra de la derecha que se mueve en estos y otros medios, que suelen originar bastante estruendo a la hora de levantar la voz; que además la suelen levantar por poco. Y a veces por nada.

Recordamos que la soldadesca que pulula por los medios referidos y a los órdenes de los citados más arriba, se mostraban escandalizados ante un vestido de buena hechura que lucía la ministra de Defensa en acto de las Fuerzas Armadas. Lo de siempre. No cesan estos voceros de la derecha española de sembrar alarma y escandalizar al máximo, sacando las cosas de quicio y de sitio. Todo lo que no sea iniciativa de ellos, está mal y no tiene razón de ser. Y hay que destruirlo.
La señora ministra,
Carma Chacón, con vestido
"como Dios manda", que aunque
no sea el del rechazo de la derecha,
da lo mismo. A quien se
rechaza es a la ministra.El
vestido es la disculpa.

Pero resulta que --mira por dónde-- fue precisamente EL Mundo quien publicó días atrás una imagen de Soraya Sáenz de Santa María, en actitud, cuando menos, para mirarla con cierta curiosidad y, ¿ por qué no ? cierta y no disimulada lascivia. Ya saben ustedes que la Santa María forma parte de la cúpula directiva actual del Pepé. Y, ya digo, mira por dónde, los que tanto criticaban a la ministra Carma Chacón por un vestido, sino de color kaki, como antes eran los uniformes del Ejército, si por ser simplemente vestido, pero vestido que configuraba la elegancia de quien lo llevaba. No había ni mal gusto ni ninguna clase de insinuación malévola, como sí cabe interpretarse a la vista de la sugerente pose de la portavoz del Pepé, Soraya Sáenz de Santa María, que buena la hizo, pues sólo con lo que dice y masculla de ella el predicador de La linterna de la COPE, el llamado César Vidal, ya va arreglada la pobre.

Y mira tú qué cosas. Hablando de modelos, de gustos, de ropajes, de mesuras y desmesuras, de gusto y estética en el vestir, en el saber estar y ser, quien más suele hablar, tiene más motivos para callar que para disentir...De modo y manera que quien dirige El Mundo --que no ea Dios ni mucho menos, ni nada que se le perezca--, el visionario de cosas que no existen, el nombrado Pedro J Ramírez, es encontrado aquí, en la imagan que insertamos con Ágata Ruiz de la Prada, diseñadora de modelos de ropas de señora --¿o es de anormalidades desorbitadas-- la cual viste que da gusto verla. Y si no es así, júzguenla ustedes y ya me dirán.Esto es, es decir, ¿qué es esto?
Cuestión de gustos.
Y de mesura.
De dignidad
y de cara dura..

Lo que hay que decir es que ambos personajes, que igual critican el vestido de la ministra Carma Chacón, son marido y mujer, salvo error o mala interpretación de la información recibida, y, en lo que nosotros entendemos, es mucho menos comentada la extraña vestidura de la señora Ruiz de la Prada, que la que ha llevado la señora ministra. Claro está, todo depende de qué lado vengan las pedradas y, naturalmente, quién las tire. Y aquí, quien las ha tirado contra el vestido de la ministra, sino fue el J Ramírez, sí fueron desde sus dominios de El Mundo, colaboradores supeditados, además de otros, que posiblemente no reprocharán las sotanas de los curas, pero si un vestido decente en una mujer, en este caso, la ministra de Defensa, a la que, claro ésta, no le perdonan que sea mujer y esté de ministra de Defensa, que son dos razones a no perdonarle; pero es que hay otras dos razones más que hay que sumar para acabar de coronarla y que tampoco le perdonan: que sea catalana y, encima del Pesoé. Lo tiene fresco la moza.

Visto, pues, uno y otro, quien mejor tendría que callar, es, como suele ocurrir, el que más habla.

jueves, 15 de enero de 2009

No Era Tanto; Era Más


Laureles, coronas, bandas y fajines;
banderas, leyendas, ofrendas,
proclamas, medallas y, por si fuera
poco, el brazo que signaba que,
por rutas imperiales se caminaba
hacia Dios , levantando España,
que no acababa de levantarse...


Mis hijos me preguntan si es verdad que Franco, el Generalísimo, figuraba en las monedas y otros lugares con la leyenda de "Por la Gracia de Dios". Pues sí, hijos, sí. Eso y mucho más se decía que era. Todas las alabanzas eran pocas. Toda clase de hipérbole se quedaba en pañales ante lo que de él se decía.Incluso la Iglesia lanzaba proclamas y solicitaba clemencia a Dios para que Franco no faltase nunca. Por eso lo llevaba bajo palio,entre bendiciones. Y aleluyas. Y Salvas. Y campanas.

Hubo un tiempo en que, al pasar por delante de algún establecimiento oficial en el que hubiese banderas o leyendas escritas en la pared, había que detenerse y saludar , brazos en alto, muy estirados, con un ¡Arriba España y un Viva Franco!, que atronase bien, dos o tres veces.
La lisonja hiperbólica no tenían límites.Y lo extraña es que el propio Franco no se ruborizara ante tanta gloria y victoria como se le otorgaba. Su proverbial sensatez y prudencia , mesura y equidad , aquí tal vez exigiese más adoración todavía. Por eso y por más ni se ruborizaba ni se extrañaba. Un elegido de Dios no podía tener menos. Por eso él creía, según se decía, que era enviado del cielo para salvar la tierra...
Si estas cosas no ruborizan
ni extrañan a unos,
a otros les causa espanto...
Por eso hay dos Españas

Véase un texto de aquellos años.Un Caudillo.Un Patriota.Un Estadista. Un paladín. Un Genio. Un elegido de Dios...y así todo lo que se quisiera, que había mucho más.
¡Y pensar que España pudo soportar este desatino tantos años...¡